viernes, 11 de diciembre de 2009


Soñé que viajé a un mundo extraño.
Donde la vida que llevo ahora no la tenía,
sino que tenía en mi poder todas las cosas con las que he soñado por años.
Soñé que la lluvia era de colores y que podía brincar libre en sus charcos.
Soñé que el mundo me regalaba sabores y que dentro de ellos estaba el sabor de tus labios.
Sentí como mi piel acariciaba alegría porque había energía en mi vida.
Soñé con un mundo inexistente, pero que vive en mí como un sobreviviente.
Soñé con un mundo de colores.

1 comentario:

Katiuska dijo...

Todos soñamos con ese mundo de colores! Todos anhelamos un dia poder vivir en el!! y dejar atras este mundo en blanco y negro que poco a poco nos ha ido arrastrando y pintando nuestra vida de gris!!!